Reniego rotúndamente de los hombres.
Reniego en particular de tí, hombre de mil cabezas.
Reniego de tu ausencia... de tus innumerables ausencias.
Reniego de tu mirada que me hace estremecer y que desaparece como rayo.
Reniego de las tardes y noches en que te pienso y no estás cerca.
Reniego de tus brazos cuando por segundos me rodean... sólo por segundos...
Reniego de lo que me haces pensar y sentir... y me revuelco entre la noche sin dormir.
Reniego de lo que puedo llegar a interpetar cuando veo "ese" corazón.
Reniego de tus lunares, acomodados como constelaciones que no se alcanzan.
Reniego del tiempo que desperdicié a tu lado bajo la luz de la luna.
Reniego de los momentos sin hablar, sin tocarnos.
Reniego de tu condición, que es sacra y barrera a la vez.
Reniego de la distancia que nos une.
Reniego del tiempo que nos separa.
Reniego de cómo te escondes... y te escondes... y te escondes...
Reniego de la maldita barra de tu ventana de msn cuando veo que escribes algo y no lo publicas... siempre te arrepientes.
Reniego de tu tan cuidada redacción.
Reniego de tu voz que extraño en el teléfono.
Reniego de lo que creo que es tu cobardía.
Reniego de mi declarado miedo a ir tras de tí.
Reniego porque también soy una maldita cobarde.
Reniego porque es amor y duele.
Reniego de que no leerás esto... y no sabrás cuánto he renegado por tí.
pd. Reniego porque el alcohol y las curitas aquí no funcionan!!! Maldita sea!!!